Las tendencias en cuanto a los formatos de currículum han cambiado drásticamente en los últimos años. No solo las expectativas de los reclutadores son más altas, sino que también tienen menos tiempo. Ellos quieren currículums que muestre un panorama de tus antecedentes y habilidades – en seis segundos o menos de lectura. Pero también quieren saber un poco sobre quién eres como persona.
Sin embargo, los empleadores dudan en contratar candidatos que tienen opiniones exageradas sobre sus capacidades, porque existe una alta probabilidad de que sea difícil trabajar con ellos. Y aunque entienden que no todos los candidatos escriben intencionalmente sus currículums de esta manera, aún puede llevar a una mala primera impresión.
Es por eso que te queremos prevenir de cometer los cinco errores más grandes, y comunes, de un currículum, que puede hacer que parezcas tan absorto en ti mismo que es posible que no recibas una llamada de vuelta.
1. Comenzar con una solicitud de un trabajo ideal.
Lo primero que ve un reclutador no debería ser una frase sobre lo que quieres de ellos. Los empleadores deben saber que puedes satisfacer sus requisitos antes de que puedan empezar a pensar en cómo satisfacer los suyos.
La solución: Deshazte de frases como “soy un emprendedor detallado que busca …” Mejor opta por un encabezado llamativo que haga referencia ampliamente a tu experiencia.
2. Viñetas sintetizadas.
Incluir viñetas debajo de cada experiencia laboral es la mejor manera de resaltar claramente su experiencia. Pero generalmente vemos demasiados currículums con viñetas que ocupan tres o más líneas. Cualquier viñeta que tenga más de dos líneas está exagerando y acaba pareciendo una oración excesivamente larga.
La solución: Elimina los adjetivos y adverbios innecesarios. El objetivo de un currículum no es contar la historia completa de tu carrera; solo debe ofrecer algunos puntos clave y logros calificables que reflejen tus habilidades más sólidas.
3. Fuentes elegantes y demasiada negrita, cursiva o subrayado.
El abuso en recursos de tipografías puede resultar insultante para el lector. Las fuentes elegantes son abrumadoras e innecesarias. A menos que estés solicitando un puesto que requiera creatividad visual, de lo contrario todo tipo de abuso en los recursos tipográficos terminarán desorientando al lector y afectando la lectura de información importante sobre ti.
La solución: No subrayes ni pongas en cursiva nada. Solo encabezados de sección en negrita y títulos de trabajo para que el lector pueda seguir fácilmente el progreso de tu carrera. Utiliza fuentes de aspecto limpio como Calibri, Helvetica, Arial o Times New Roman.
4. Un currículum de varias páginas.
Si has tenido una carrera larga y distinguida, no te preocupes por tratar de mantener tu currículum en menos de una página. Simplemente no pases de más de tres páginas, porque ahí es cuando se vuelve difícil mantener la atención de un reclutador.
Sin embargo, si tu experiencia no garantiza tanto espacio, un currículum de varias páginas solo afectará tus posibilidades de obtener una entrevista. Podría parecer que está tratando demasiado de venderte a ti mismo, tanto que ni siquiera sabes qué habilidades son más relevantes para el puesto.
La solución: Si has tenido muchos trabajos anteriores, considera eliminar los que no estén relacionados con el puesto que estás solicitando. Los puestos que son demasiado básicos en comparación con su nivel de experiencia actual también son innecesarios y ocupan espacio importante.
5. La imagen no lo es todo.
Si bien una foto en un curriculum es algo normal, debes cuidar que no abarque demasiado espacio, así como evitar que las fotografías muestren una apariencia poco profesional.
La solución: Busca que tus logros, no tu apariencia, hablen por ti.